Alcoyano: Dorronsoro (1), Devesa (1), Aloisio (1), Fernando Martín (1) (Rojas (-), m.80), Carrión (1), Gato (!) (Álvaro (!), m.56), Xavi Molina (1), Fran Miranda (1), Wellington (2), Paco Esteban (1) (David Torres (1), m.46) y Rafa Gómez (2).
Cartagena: Juanma (2), Txiki (1), Chus Herrero (2), Abraham Paz (2), Kijera (1), Collantes (1) (Lafuente (-), m.85), Julien (0), Dimas (1), Marc Fernández (0) (Riau (1), m.68), Álvaro (2) y Braulio (2) (Raimondi (1) m.76).
Goles: 0-1, m.50: Álvaro Antón. 0-2, m.54: Braulio. 1-2, m.59: Rafga Gómez. 2-2, m.77: David Torres.
Árbitro: López Acera (colegio extremeño). Amonestó a los locales Paco Esteban y Wellington y a los visitantes Julien, Álvaro, Chus Herrero, Dimas, Braulio y Riau. En el minuto 90 expulsó al cartagenerista Chus Herrero por doble amonestación.
Incidencias:Liga Adelante. Partido jugado en el campo de El Collao ante 4.000 espectadores con unos doscientos seguidores albinegros. Terreno de juego en regulares condiciones.
LA CRONICA
Por GUILLERMO JIMENEZ
La segunda edición del 24 de mayo de 2009 en El Collao dio la impresión se iba a dar cuando en el minuto 55 de juego del partido escoba de la jornada en la Liga Braulio marcaba con el pecho su primer gol para el Cartagena, que ya ganaba por 0-1 con el tanto de Álvaro Antón cinco minutos antes. El pasaporte a la permanencia parecía en el bote de Carlos Ríos, pero al final las circunstancias que enseguida analizaré dejaron el duelo en 2-2, al igual que aquel decisivo partido de hace tres años.
Se oyeron gritos de aliento para un crecido Cartagena por los dos centenares de seguidores que estuvieron en las gradas, el cuadro portuario tenía encauzada la final pero un error colosal de Julien, en el minuto 59, regaló el primer gol al Alcoyano. Julien no dejó que el meta Juanma se hiciese blocase un balón diáfano y con el despeje fallido del albinegro el delantero Rafa Gómez transformó el obsequio en el principio de los tormentos para los cartageneristas.
Obviamente el Alcoyano se creció anímicamente. Ya la primera media hora del partido había sido albiazul y el Cartagena comenzó a dar síntomas de intentar ir por el partido en el último cuarto de hora al contrarrestar en dominio y posesión de pelota a los de David Porras. El entrenador albinegro retocó el sistema y trabajó con Álvaro Antón erigiéndose en clave del desenvolvimiento ofensivo. Fue uno de los mejores partidos ofrecidos por el burgalés.
Iba descaradamente de menos a más el Cartagena, cargado de tarjetas desde el inicio,logró lo más difícil que era batir la meta alcoyanista con un precioso tanto de Álvaro Antón, remachó la proeza con el gol del canario Braulio y cuando lo más coherente era saber defender sin complicaciones y esperar la llegada de alguna contra que le sirviese de puntilla con un tercer gol, Julien vino a cometer un error de los que penetran en la historia directamente y puso alfombra en el camino del Alcoyano hacia la tarea de impedir que el visitante venciese en un enfrentamiento clave. El cuadro de CR tenía perfectamente controlada la situación. Ya estaban asentados los jugadores, se supone que motivados por encauzar el choque.
Cualquier jugada de Wellington o de Rafa Gómez pudo representar peligro cara a Juanma, la reducción de la renta en el marcador podía darse, pero no de la forma en la que se presentó, como un obsequio servido con lazo. Ahí duele. La avalancha albiazul la cortó el Cartagena como pudo, con firmeza en el juego aéreo y contundencia, pero fue inevitable el tanto del empate, en el minuto 77, en remate en boca de gol de Torres, delantero ex albacetense que firmó el club de El Collao en el mercado de invierno.
Psicológicamente, el Alcoyano estaba más entero con el empate y optó a latigazos, en entradas por bandas, a la desesperada, a ganar remontando a la heroica, pero al menos el Cartagena y su portero Juanma estuvieron acertados en la faceta de defender. La parada de la noche la hizo el meta albinegro a los 82 minutos en un rechace de la cruceta con posterior remate a bocajarro de un albiazul que sacó el cancerbero extremeño.
Un punto en un partido emocionante, con vibraciones, loco de atar en momentos. Parte de la clave de la permanencia. Los de CR hicieron lo que tenían que hacer y solo el infortunio y el desacierto en un momento puntual quebraron la alegría que rodeaba las acciones cartageneristas. Un 2-2 que no es despreciable desde el punto de vista de un muy necesitado de puntos FC Cartagena, visto lo que pudo acarrear al final una derrota, que también se paseó por El Collao.
Esta vez el talante de los cartageneristas fue bueno. Lo único que sobró fue un error, la pifia del dorsal 12. Un accidente que casi manda al equipo visitante al abismo. Próximos encuentros del Cartagena pueden aportar luz.
