10 de octubre de 2014, 15:17
Javier Marco, el joven presidente cartagenerista, viaja en el autobús del FC Cartagena al frente de la expedición. Ni es la primera ni, posiblemente, será la última.
Lo hace como un componente más del equipo, ataviado con la misma equipación. Quien no le conozca le podría confundir perfectamente con un futbolista más.
De hecho en el autobús viajan jugadores de más edad que él.
El valenciano, que por cierto fue el último en subir al autobús, viaja con la ilusión de regresar con los tres puntos en juego. "Estoy convencido de que vamos a ganar, necesitamos los tres puntos y sé que los jugadores lo van a dar todos. Además, tenemos muchos futbolistas de calidad”.
Marco sabe la distancia que separa Cartagena de Lepe. "Ya me han contado, pero yo espero pasar un buen viaje, sobre todo a la vuelta si lo hacemos con los tres puntos”, decía prácticamente con el pie puesto en la escalerilla del autocar.
Undécimos y decimoterceros en la clasificación, respectivamente, afrontan la octava jornada de liga en una situación poco tranquila que no les da pie a dejarse muchos más puntos por el camino si a final de curso quieren estar entre los mejores del grupo y optar al ascenso a la categoría de plata.
El Ciudad de Lepe se engalonará para recibir a un rival siempre complicado y bastante temido de la categoría, donde sus aficionados pueden tener una parte importante de la victoria en sus manos si consiguen llevar en volandas al equipo. El Cartagena partió a las 12 en punto y espera llegar a Lepe para la hora de la cena.
