5 de marzo de 2011, 1:00
FICHA TÉCNICA
RESULTADO
Gimnàstic 2-0 FC Cartagena
ALINEACIONES
Gimnàstic: Rubén (1); Bergantiños (1), Sergio (1), Morán (2), A. Felipe (2), Powel (2), Mairata (2), Seoane (1), Fuster (1), Xisco Campos (1), Gerardo (1).
FC Cartagena: Casilla (1); Txiki (2), Cala (1), Cygan (2), Clavero (1); Mariano (1), Longás (2); Moral (2), Víctor (2), Botelho (1); Toché (0).
GOLES
1-0. Min. 25. Mairata desde dentro del área.
2-0. Min. 71. Morán de volea desde fuera del área.
ÁRBITRO
Amoedo Chas del colegio gallego.
INCIDENCIAS
28ª jornada de la liga Adelante. 3.347 espectadores en el Nou Estadi de Tarragona.
LA CRÓNICA
Por GUILLERMO JIMÉNEZ
Tenía que ser Morán, uno de los veteranos del Nástic, con su certero zapatazo desde fuera del área, en parábola y a lo Víctor, el que marcase el 2-0 que hacía imposible la reacción del Cartagena en Tarragona en un momento clave del segundo tiempo. Kiko Casilla se vio tan sorprendido que ni se movió.
Estaban jugando los cartageneristas para al menos empatar, envolvían a los catalanes con un juego rápido y con triangulaciones pero encajaron el segundo tanto cuando mejor se desenvolvían. Toni Moral y Víctor llevaban el peligro y el equipo se lanzó a por todas, reforzado además por las incorporaciones de los andaluces Rodri y José Carlos.
Los de Juan Ignacio habían despertado de su letargo, se daban las circunstancias para la variante en el marcador, pero ese golazo de Morán tiró por los suelos las aspiraciones del Cartagena en esta salida. Así es el fútbol. Un desenlace inmerecido. Cuatro reveses en los últimos desplazamientos. Tal vez el de hoy en Cataluña haya sido el menos justificado.
No quiero decir que el Nástic no trabajó para vencer. Se multiplicó, optó al éxito en el primer tiempo y en el segundo se vio desbordado. Pero la fuerte influyó y le ayudó al cuadro de Oliva, al que se ve recuperado anímicamente con el éxito anterior en Jerez. Un equipo en el que el holandés Powel tiene protagonismo y en el que jóvenes y veteranos conjugan un plantel idóneo para la categoría. Una defensa recia que no duda en incorporarse al ataque en acciones sorpresa, como se demostró en el 1-0, de Mairata, y un centro de campo mejor en la fase inicial que en la segunda.
La incorporación de Rodri y José Carlos (63 minutos) sobre la marcha fueron buenas aportaciones orientadas a un juego más ofensivo, pero excepto el tiro de Toni Moral a la cruceta de la meta de Rubén, la verdad es que tiros entre los tres palos hubo pocos. Antonio Longás volvió a conducir el juego y eso fue advertido por el conjunto de forma positiva. Longás llevó muchos balones al área granate en una jornada que fue para los albinegros diferente en sus tiempos.
RETIRADA DE TOCHE POR PRECAUCION
El Cartagena perdió el tiempo en la primera fase, con un juego deslavazado y gris, y supo reaccionar cuando era exigible, pero le faltó definición. Buscó el gol con prisas. Juan Ignacio arriesgó, introdujo cambios tendentes a dejar pocos hombres en defensa para incrementar la ofensiva, pero la ausencia de Toché, que se retiró con sobrecarga muscular y por precaución, no fue cubierta adecuadamente por Goiría.
Hay que elogiar a los albinegros porque incluso con el 2-0 no perdió los papeles. Buscó el tanto que diese oxígeno al equipo. Se vaciaron sus jugadores y cambiaron la mala impresión que dejaron inicialmente.
Esta vez los cambios fueron los adecuados, me parece, se intentó todo pero no pudo ser. El Nàstic se llevó el gato al agua y el Cartagena no pudo romper la dinámica de ineficacia fuera de casa.
RESULTADO
Gimnàstic 2-0 FC Cartagena
ALINEACIONES
Gimnàstic: Rubén (1); Bergantiños (1), Sergio (1), Morán (2), A. Felipe (2), Powel (2), Mairata (2), Seoane (1), Fuster (1), Xisco Campos (1), Gerardo (1).
FC Cartagena: Casilla (1); Txiki (2), Cala (1), Cygan (2), Clavero (1); Mariano (1), Longás (2); Moral (2), Víctor (2), Botelho (1); Toché (0).
GOLES
1-0. Min. 25. Mairata desde dentro del área.
2-0. Min. 71. Morán de volea desde fuera del área.
ÁRBITRO
Amoedo Chas del colegio gallego.
INCIDENCIAS
28ª jornada de la liga Adelante. 3.347 espectadores en el Nou Estadi de Tarragona.
LA CRÓNICA
Por GUILLERMO JIMÉNEZ
Tenía que ser Morán, uno de los veteranos del Nástic, con su certero zapatazo desde fuera del área, en parábola y a lo Víctor, el que marcase el 2-0 que hacía imposible la reacción del Cartagena en Tarragona en un momento clave del segundo tiempo. Kiko Casilla se vio tan sorprendido que ni se movió.
Estaban jugando los cartageneristas para al menos empatar, envolvían a los catalanes con un juego rápido y con triangulaciones pero encajaron el segundo tanto cuando mejor se desenvolvían. Toni Moral y Víctor llevaban el peligro y el equipo se lanzó a por todas, reforzado además por las incorporaciones de los andaluces Rodri y José Carlos.
Los de Juan Ignacio habían despertado de su letargo, se daban las circunstancias para la variante en el marcador, pero ese golazo de Morán tiró por los suelos las aspiraciones del Cartagena en esta salida. Así es el fútbol. Un desenlace inmerecido. Cuatro reveses en los últimos desplazamientos. Tal vez el de hoy en Cataluña haya sido el menos justificado.
No quiero decir que el Nástic no trabajó para vencer. Se multiplicó, optó al éxito en el primer tiempo y en el segundo se vio desbordado. Pero la fuerte influyó y le ayudó al cuadro de Oliva, al que se ve recuperado anímicamente con el éxito anterior en Jerez. Un equipo en el que el holandés Powel tiene protagonismo y en el que jóvenes y veteranos conjugan un plantel idóneo para la categoría. Una defensa recia que no duda en incorporarse al ataque en acciones sorpresa, como se demostró en el 1-0, de Mairata, y un centro de campo mejor en la fase inicial que en la segunda.
La incorporación de Rodri y José Carlos (63 minutos) sobre la marcha fueron buenas aportaciones orientadas a un juego más ofensivo, pero excepto el tiro de Toni Moral a la cruceta de la meta de Rubén, la verdad es que tiros entre los tres palos hubo pocos. Antonio Longás volvió a conducir el juego y eso fue advertido por el conjunto de forma positiva. Longás llevó muchos balones al área granate en una jornada que fue para los albinegros diferente en sus tiempos.
RETIRADA DE TOCHE POR PRECAUCION
El Cartagena perdió el tiempo en la primera fase, con un juego deslavazado y gris, y supo reaccionar cuando era exigible, pero le faltó definición. Buscó el gol con prisas. Juan Ignacio arriesgó, introdujo cambios tendentes a dejar pocos hombres en defensa para incrementar la ofensiva, pero la ausencia de Toché, que se retiró con sobrecarga muscular y por precaución, no fue cubierta adecuadamente por Goiría.
Hay que elogiar a los albinegros porque incluso con el 2-0 no perdió los papeles. Buscó el tanto que diese oxígeno al equipo. Se vaciaron sus jugadores y cambiaron la mala impresión que dejaron inicialmente.
Esta vez los cambios fueron los adecuados, me parece, se intentó todo pero no pudo ser. El Nàstic se llevó el gato al agua y el Cartagena no pudo romper la dinámica de ineficacia fuera de casa.
