1 de febrero de 2012, 20:01
Salva Chamorro parece que emerge de nuevo. Esa impresión ha dado durante el entrenamiento matinal de este miércoles en las instalaciones del 'Gómez Meseguer', dónde el futbolista se ha unido al grupo sin problemas, ha tocado el balón, ha participado del juego y ha disparado con ganas y con fuerzas como se refñeja en la imagen de Andy Céspedes.
Al joven delantero cartagenerista le está costando un potosí salir a flote durante esta temporada. Su primer contratiempo le llegó demasiado pronto, en la segunda jornada. Cuando mejor parecía estar ante el Barça B le llegó su primera lesión que le mantuvo alejado durante seis largas jornadas.
Pero ya no volvió a ser titular hasta la llegada de Carlos Ríos, en la jornada 19 y lo coronaría con la guinda de un gol. Hasta ahí ha sido un calvario por lo que ha pasado este jugador. Primero la lesión, con lo que ya no pudo seguir contando para Paco López, el primer técnico. Y para Javi López apenas contó en los tres meses del técnico catalán, que solamente contó con él en cuatro partidos como suplente y en los últimos minutos.
Unas desafortunadas declaraciones estuvieron cerca de buscarle un disgusto con el resto de compañeros cuando llegó a decir que a este paso el equipo se iba a Segunda B y reclamó un sitio entre los once jugadores. Tuvo que disculparse en el vestuario y apretar los dientes.
La llegada de Carlos Ríos parecía una puerta abierta para recuperar la titularidad. Y así estaba siendo hasta que llegó el partido de Villarreal y caía lesionado antes de que acabase el primer tiempo. Dos semanas han tenido que pasar para que Salva, considerado una de las más firmes promesas del equipo, vuelva con fuerzas, al menos a los entrenamientos, y se ponga a disposición del técnico.
Su fama de jugador 'de cristal' quiere acabar con ella. Para ello no hay nada mejor que jugar y marcar goles. De momento será una opción más para elegir junto a los recientes fichajes de Raimondi y Braulio.
Al joven delantero cartagenerista le está costando un potosí salir a flote durante esta temporada. Su primer contratiempo le llegó demasiado pronto, en la segunda jornada. Cuando mejor parecía estar ante el Barça B le llegó su primera lesión que le mantuvo alejado durante seis largas jornadas.
Pero ya no volvió a ser titular hasta la llegada de Carlos Ríos, en la jornada 19 y lo coronaría con la guinda de un gol. Hasta ahí ha sido un calvario por lo que ha pasado este jugador. Primero la lesión, con lo que ya no pudo seguir contando para Paco López, el primer técnico. Y para Javi López apenas contó en los tres meses del técnico catalán, que solamente contó con él en cuatro partidos como suplente y en los últimos minutos.
Unas desafortunadas declaraciones estuvieron cerca de buscarle un disgusto con el resto de compañeros cuando llegó a decir que a este paso el equipo se iba a Segunda B y reclamó un sitio entre los once jugadores. Tuvo que disculparse en el vestuario y apretar los dientes.
La llegada de Carlos Ríos parecía una puerta abierta para recuperar la titularidad. Y así estaba siendo hasta que llegó el partido de Villarreal y caía lesionado antes de que acabase el primer tiempo. Dos semanas han tenido que pasar para que Salva, considerado una de las más firmes promesas del equipo, vuelva con fuerzas, al menos a los entrenamientos, y se ponga a disposición del técnico.
Su fama de jugador 'de cristal' quiere acabar con ella. Para ello no hay nada mejor que jugar y marcar goles. De momento será una opción más para elegir junto a los recientes fichajes de Raimondi y Braulio.
