4 de marzo de 2011, 1:00
A todos nos pasa, y el Cartagena no iba a ser menos. Todos tenemos gente de confianza, con la que nos sentimos o trabajamos mejor y eso, a la larga, se nota. Además, en fútbol, eso cobra una importancia casi capital. Por si todavía no me seguís, estoy hablando de Toché. Con el santomerano, el ataque albinegro gana en mordiente, en amenaza, en gol. Con él, los centrocampistas ganan en espacio para desarrollar su juego, porque tienen menos atención de los rivales. Atención que casi capitaliza Toché (renovación, como diría Jotaefe).
En cualquier caso, el Cartagena parece que ha encontrado el territorio en el que va a luchar lo que queda de temporada. Tal y como está la categoría, es muy probable que el equipo de Juan Ignacio dispute las posiciones de play off de ascenso hasta que esto se acabe. Conocer el entorno, saber donde te mueves, eso siempre da familiaridad, lo que es importante para conseguir rendimiento. De todas maneras, es recomendable que el conjunto albinegro ajuste ciertos aspectos como, por ejemplo, ser más fiable fuera de casa, donde ha perdido seis encuentros, empatado tres y ganado cuatro. Conviene dejar atrás la irregularidad de los últimos partidos y, al menos, puntuar de manera que se eso se acabe convirtiendo en acto reflejo, en algo casi involuntario. Coger el hábito de ganar.
En ese sentido se pronunció Juan Ignacio en la rueda de prensa: “en Tarragona debemos dar una imagen muy seria, mejor que en salidas anteriores”. Las últimas dos experiencias fuera de casa fueron especialmente calamitosas. En el Miniestadi culé, donde el filial blaugrana pasó por encima de unos cartageneristas que no supieron sufrir sin balón y bailaron al son que marcaba Thiago, y en Córdoba, donde un impetuoso equipo blanquiverde le puso el partido al Cartagena como si fuera una subida al Tourmalet en tan solo diecioho minutos. Dieciocho entusiastas minutos.
Tarragona debe ser otra historia, y para ello el Cartagena (7º con 41 puntos) recupera varios hombres importantes que no pudieron estar, por sanción, ante el Tenerife. Tal es el caso de Clavero o de Cygan. El francés tiene muchas papeletas para entrar en el once dada la baja, por lesión, del sevillano Pablo Ruiz. Para el lateral derecho, todo apunta a que repetirá Txiki, ya que Chus Herrero no ha podido finalmente entrar en la convocatoria, por molestias en el gemelo, y Expósito hace tiempo que dejó de contar para Juan Ignacio y para la mayoría de la afición. Para el centro del campo, vuelve otro sancionado, Toni Moral, y se cuenta con la duda de si será José Carlos o Antonio Longás el que acompañe a Mariano en el doble pivote, puesto que el sevillista se tuvo que retirar con molestias del partido ante el Tenerife. Maldonado, quien debutó recientemente, finalmente no viaja.
El Nàstic (17º con 27 puntos) llega en una situación parecida a la del Tenerife hace unos días. Ganó al Xerez por 1-2 – un Xerez que últimamente ha entrado en barrena y está ofreciendo victorias previas a todos los equipos que se van a enfrentar al Cartagena – y sale de puestos de descenso después de haber cambiado de entrenador. Luis César dejó paso a Juan Carlos Oliva, y desde entonces el equipo tarraconense ofrece mayor estabilidad y seguridad defensiva, sobre todo en casa, donde sólo ha encajado dos goles en los últimos seis partidos jugados en el Nou Estadi. Cuenta con la baja de larga duración de Vigueira, quien llegó en el mercado de invierno, pero se rompió el ligamento cruzado anterior de su rodilla derecha.
Así pues, un partido que pondrá a prueba la capacidad la ofensiva del Cartagena, comandada por el aclamado Toché, ya que se las verá con una de las defensas más ajustadas en su terreno de juego. La verdadera prueba del nueve – y nunca mejor dicho – para un equipo que, últimamente, se muestra ramplón lejos de la rambla de Benipila y que quiere cambiar esa dinámica. El encuentro será dirigido por el gallego Amoedo Chas.
En cualquier caso, el Cartagena parece que ha encontrado el territorio en el que va a luchar lo que queda de temporada. Tal y como está la categoría, es muy probable que el equipo de Juan Ignacio dispute las posiciones de play off de ascenso hasta que esto se acabe. Conocer el entorno, saber donde te mueves, eso siempre da familiaridad, lo que es importante para conseguir rendimiento. De todas maneras, es recomendable que el conjunto albinegro ajuste ciertos aspectos como, por ejemplo, ser más fiable fuera de casa, donde ha perdido seis encuentros, empatado tres y ganado cuatro. Conviene dejar atrás la irregularidad de los últimos partidos y, al menos, puntuar de manera que se eso se acabe convirtiendo en acto reflejo, en algo casi involuntario. Coger el hábito de ganar.
En ese sentido se pronunció Juan Ignacio en la rueda de prensa: “en Tarragona debemos dar una imagen muy seria, mejor que en salidas anteriores”. Las últimas dos experiencias fuera de casa fueron especialmente calamitosas. En el Miniestadi culé, donde el filial blaugrana pasó por encima de unos cartageneristas que no supieron sufrir sin balón y bailaron al son que marcaba Thiago, y en Córdoba, donde un impetuoso equipo blanquiverde le puso el partido al Cartagena como si fuera una subida al Tourmalet en tan solo diecioho minutos. Dieciocho entusiastas minutos.
Tarragona debe ser otra historia, y para ello el Cartagena (7º con 41 puntos) recupera varios hombres importantes que no pudieron estar, por sanción, ante el Tenerife. Tal es el caso de Clavero o de Cygan. El francés tiene muchas papeletas para entrar en el once dada la baja, por lesión, del sevillano Pablo Ruiz. Para el lateral derecho, todo apunta a que repetirá Txiki, ya que Chus Herrero no ha podido finalmente entrar en la convocatoria, por molestias en el gemelo, y Expósito hace tiempo que dejó de contar para Juan Ignacio y para la mayoría de la afición. Para el centro del campo, vuelve otro sancionado, Toni Moral, y se cuenta con la duda de si será José Carlos o Antonio Longás el que acompañe a Mariano en el doble pivote, puesto que el sevillista se tuvo que retirar con molestias del partido ante el Tenerife. Maldonado, quien debutó recientemente, finalmente no viaja.
El Nàstic (17º con 27 puntos) llega en una situación parecida a la del Tenerife hace unos días. Ganó al Xerez por 1-2 – un Xerez que últimamente ha entrado en barrena y está ofreciendo victorias previas a todos los equipos que se van a enfrentar al Cartagena – y sale de puestos de descenso después de haber cambiado de entrenador. Luis César dejó paso a Juan Carlos Oliva, y desde entonces el equipo tarraconense ofrece mayor estabilidad y seguridad defensiva, sobre todo en casa, donde sólo ha encajado dos goles en los últimos seis partidos jugados en el Nou Estadi. Cuenta con la baja de larga duración de Vigueira, quien llegó en el mercado de invierno, pero se rompió el ligamento cruzado anterior de su rodilla derecha.
Así pues, un partido que pondrá a prueba la capacidad la ofensiva del Cartagena, comandada por el aclamado Toché, ya que se las verá con una de las defensas más ajustadas en su terreno de juego. La verdadera prueba del nueve – y nunca mejor dicho – para un equipo que, últimamente, se muestra ramplón lejos de la rambla de Benipila y que quiere cambiar esa dinámica. El encuentro será dirigido por el gallego Amoedo Chas.
