26 de mayo de 2014, 15:29
Con más problemas de los previstos, y en dos encuentros emocionantísimos, Basket Cartagena y CB Estudiantes Cartagena vencieron en semifinales a AD Infante (41-35) y Molina Basket (42-40) respectivamente, para meterse en una final que deparaba un derbi local muy interesante por lo visto en los últimos enfrentamientos.
Los partidos de semifinales estuvieron marcados por el nerviosismo y la precipitación de las jugadoras, traducido esto en baloncesto poco fluido y resultados de poca anotación. Ambos equipos cartageneros sufriendo hasta el último segundo para superar a rivales a los que en Liga Regular habían superado con mucha más amplitud, poniendo de manifiesto que en una final así ningún equipo te regala nada.
El tercer y cuarto puesto siguió el mismo guión y fue AD Infante quien se alzó con la victoria por 49-44. A las 12 del domingo, llegaba el plato fuerte, la gran final que no defraudó a los espectadores que abarrotaban el pabellón dividiendo la grada en naranjas y azules. El partido, pese a repetirse las condiciones de poca fluidez y poca anotación, fue vibrante, emocionante, y bordeó la épica.
Los primeros 18 minutos de juego hacían presagiar una mañana de gran tensión: dos equipos que se conocían muy bien, muy igualados y que no se dejaban anotar fácil. Ningún conjunto era capaz de coger ventaja en el marcador y eso era buena noticia para un CB Estudiantes Cartagena que pese a no encontrar su mejor juego, salió a la cancha con mucha más personalidad y decisión que en el partido de semifinales donde los nervios atenazaron a las nuestras.
Sin embargo, al borde del descanso, un par de errores defensivos y en la salida de balón provocaban que la alternancia en el marcador quedara lejos y las anfitrionas colocaban un “peligroso” 28-21 al descanso. Las buenas sensaciones de los dos primeros cuartos se diluyeron un poco, pero lo mejor estaba por venir.
Tras la reanudación, las estudiantiles salieron con decisión a intentar poco a poco reducir la ventaja, con más agresividad y circulación en ataque, pero Basket Cartagena no solo respondía a esos intentos, sino que durante el tercer cuarto fue capaz de aprovechar los pequeños errores de nuestras chicas para llegar a colocar una ventaja de +13 puntos que hacía pensar en una remontada imposible. Pero nuestras guerreras no lo creyeron así, la fe y un esfuerzo titánico en defensa, alternando zonas presionantes y presión individual a toda la pista hizo que en el último cuarto, CB Estudiantes Cartagena se colocara por encima en el marcador ante la incredulidad de las anfitrionas y su público. Por desgracia, el CBEC pudo sentenciar el partido pero perdonó alguna canasta bajo el aro, concedió alguna oportunidad extra a su rival fruto del cansancio y con +1 en el marcador, posesión y 30 segundos por jugarse, la ambición por querer anotar les hizo perder un balón clave que Basket Cartagena con muchos problemas, aprovechó para forzar la prórroga con un tiro libre. En este momento, el partido ya alcanzaba la categoría de épico.
Pero las chicas de ambos equipos aún nos tenían reservados minutos de más emoción. Basket Cartagena entró mejor en la prórroga y se colocó 5 puntos arriba. Las “guerreras” del CBEC volvieron a hacer honor a su apelativo y volvieron a remontar el partido y las adversidades en forma de cansancio, lesiones o eliminaciones por faltas. Con el partido empatado, bonus a favor y posesión de 15 segundos, el miedo al fallo o a la pérdida de balón provocó que las estudiantiles no probaran ni el lanzamiento a canasta y se llegara a una segunda prórroga donde se veía a las cartageneras más enteras. Una nueva eliminación importante en el cuadro estudiantil parecía decantar definitivamente el partido para las locales, pero aún las naranjas dieron su último coletazo con un triple que colocaba a 1 punto a falta de 2 minutos. Fue el último golpe de coraje de las chicas que tras 50 minutos de partido y tensión no pudieron hacer más y Basket Cartagena en sendos contraataques colocaba el 60-53 final de un partido para recordar.
Felicitar al rival en primer lugar por una victoria también merecida y trabajada. Y después, hay mucho que decir sobre este grupo de jugadoras y cuerpo técnico que cumplían 4 años juntos de durísimo trabajo y grandes resultados, y que de forma muy cruel no pudo culminarse con el campeonato regional, que sinceramente, merecieron en el día de ayer. Toda una demostración de carácter, lucha, superación, coraje, solidaridad y espíritu de equipo ante un rival que en Liga Regular ganó ampliamente ambos partidos, quedando patente la mejora y el esfuerzo de las nuestras durante la temporada.
No pudo ser, se perdonó en los momentos claves tras culminar una remontada espectacular y el subcampeonato sabe a poco. No obstante, es una victoria moral para las chicas y para el Club, que jugó de tu a tu al club referencia de la ciudad tanto en las gradas como en la pista y no sólo compitió dignamente, sino que tuvo contra las cuerdas y al borde del KO al máximo favorito de la competición en dos ocasiones.
