La polémica parece imposible de pararla entre el Cartagena y el CD Algar si Belmonte sigue en sus trece de no permitir que el equipo algareño pueda utilizar el Estadio para jugar su partido de Copa del Rey ante un Primera División que se conocerá este lunes. Á pesar de la promesa hecha en su día por Álvaro Valdés, concejal de Deportes, el dueño del club albinegro ya le ha dicho al edil en una reunión mantenida en la mañana de este jueves que no, que el Estadio no se puede utilizar a pesar de ser una instalación municipal, para que el CD Algar la utilice para un partido histórico para e. Como si el dueño del FC Cartagen lo fuesen de la instalación municipal, propiedad por tanbto de todos los cartageneros. .
Todo ello a pesar de que el club algareño es considerado ‘amigo’ tras el apoyo recibido en 2015, cuando Belmonte se hizo cargo del club, que recurrió al conjunto algareño a través de su entonces entrenador Manolo Palomeque para hacerse de futbolistas que entonces necesitaba el Efesé para competir y evitar el descenso, como así ocurrió al final. En aquellos momentos el CD Algar se prestó incondicional para ayudar a un Efesé moribundo, un gesto que parece haber olvidado el periodista murciano.
El problema radica en que desde hace meses hay programada una resiembra del césped según confirmaban esta tarde a este diario fuentes municipales que, a pesar de todo, no descartan que se pueda celebrar este partido. Según ha podido conocer este diario digital la opción es esperar acontecimientos, ver el equipo que le toca en suerte al CD Algar en el sorteo y plantearle la posibilidad de atrasar el partido hasta final de mes.
UN PROBLEMA INESPERADO QUE SIENTA MAL EN EL ALGAR
La resiembra está programada que arranque el día 5 de noviembre y todo estaría en función qué para las fechas del encuentro, el 12 ó el 13 de noviembre, el césped ya pudiera restar dispuesto para ser utilizado. La otra opción sería atrasar el encuentro ocho o diez días a ver si para entonces el césped ya está fuerte y pudiera aguantar el partido sin problemas. La resiembra, nos cuentan, es inaplazable y tiene sus fechas que hay que respetar pero esto crea un problema entre el Ayuntamiento y el CD Algar, que también es un club cartagenero y que cuenta con la promesa municipal que no quiere aventurarse en otra cuestión que no sea la prudencia y la espera de acontecimientos.
Para que los plazos no pillen desprevenidos a nadie las mismas fuentes municipales añadían que, por si acaso, habrá que pensar en tener un Plan B previsto por si acaso hay que utilizarlo. Pasaría por las instalaciones del ‘Gómez Meseguer’, por el campo principal de La Manga Club con una grada con capacidad para 800 personas y la posibilidad de instalar gradas metálicas o incluso acabar jugando en el propio ‘Sánchez Luengo’ aunque el principal hándicap es que, al ser campo de hierba artificial no sería admitida por la RFEF.
DESDE EL AYUNTAMIENTO SE PIDE PRUDENCIA
Para que puedan encajar todas las piezas habría que empezar contando con el visto bueno del equipo que le toque al CD Algar. Y para ello hay que esperar al sorteo. Si esto fuese, es decir que el rival de turno aceptase atrasar el partido ocho o diez días, se reducirían bastante las dificultades que ahora mismo parecen que existen porque Belmonte no es de los que dan su brazo a torcer. El siguiente fin de semana, entre el 19 y el 20 de noviembre, ya no habrá fútbol -la Liga Smartbank no se para y el Cartagena jugará ese finde en Miranda del Ebro- aunque desde el Ayuntamiento descartan que este encuentro del Algar se dispute fuera del término municipal.
A pesar de la negativa del Belmonte y su poca o nula consideración con el CD Algar fuentes municipales piden prudencia y se basan en la seguridad de que se acabará encontrando soluciones al problema al que se enfrentan. En cualquier caso con esta nueva polémica una vez más queda la sensación de que parece lo que no es, esto es, que Belmonte es el dueño y señor de unas instalaciones que no dejan de ser municipales a todos los efectos y que el CD Algar es un club cartagenero al que desde el municipio se le prometió jugar ese partido en el recinto municipal. Una 'patata caliente' que desde la ncesaria resonsabilidad municipal deberan de enfriar.
