30 de marzo de 2011, 2:00
FICHA TÉCNICA
RESULTADO
FC Cartagena 2-0 Villarreal B
ALINEACIONES
FC Cartagena: Casilla (2); Txiki (2), Pablo Ruiz (2), Cygan (2), Botelho (3); Mariano (2), Iñaki Muñoz (2); Toni Moral (3), Víctor (2), José Carlos (2); Goiría (0). También jugaron Riga (1), Clavero (1) y Julien (-).
Villarreal B: Mariño (2); Olivas (1), Falqué (2), Gullón (2), Insa (1), Gerard Bordas (2), Mano (1), Airam (1), Marquitos (1), Costa (1), Dervite (1). También jugaron Castellani (1), Wakaso (1)
GOLES
1-0. Min. 27. Botelho de jugada personal por la izquierda.
2-0. Min. 78. Pablo Ruiz de cabeza.
ÁRBITRO
Prieto Iglesias, del colegio navarro. Tarjetas para los cartageneristas Mariano (68) y Txiki (89) y para los villarrealenses Airan Cabrera (13), Gullón (39), Bordás (51), Jaume (74), Nacho Insa(83) y Wakaso (71)
INCIDENCIAS
31ª jornada de la liga Adelante. Estadio Cartagonova.
9.833 espectadores en las gradas según datos del club.
La CRÓNICA
Por GUILLERMO JIMÉNEZ
Muy buen sabor dejó el Cartagena en su pelea con los villarrealenses. Sus jugadores se han vaciado y sacado a relucir lo mejor de que disponen, sus virtudes y han tapado sus defectos con casta para imponerse a un técnico Villarreal B con dos goles, uno en cada tiempo, dos goles de perfecta ejecución, el primero de Botelho, sensacional, y el segundo, de categoría, de un Pablo Ruiz incorporado al remate de una falta botada por Iñaki Muñoz. La permanencia casi está en el bote y se abre un abanico de posibilidades para pensar como mínimo en la fase de ascenso a Primera, la novedad de esta campaña.
El cuarto gol que marca Pedro Botelho en la Liga para el Cartagena, el de esta tarde ante el Villarreal B, que colocó el 1-0 en el marcador, levantó a los aficionados de los asientos en una tarde que comenzó por ser emotiva con dos actos previos: el homenaje póstumo a Txutxi Aranguren, con la exhibición de un pancarta portada por antiguos jugadores solos, y el homenaje por la estadística brillante de Víctor en el fútbol, con el testimonio de la entrega de una metopa por el presidente de la entidad, Paco Gómez.
El extraordinario gol de Botelho, conseguido a los 27 minutos, al realizar una galopada sensacional por su banda y acabar la jugada con un chutazo que batió a Mariño porque el brasileño optó por la individualidad ante la ausencia de compañeros en posición de hacer gol.
Diez minutos después el propio Botelho se sacó de la manga otra arrancada por el mismo carril, con su velocidad habitual, y buscó repetir la suerte del gol pero su tiro dio en el lateral de la red.
Hasta la llegada de ese tanto que rompía el 0-0 el partido transcurría por los caminos de una igualdad, un toma y daca con escasas llegadas de los albinegros al área amarilla. El Villarreal B organizó una defensa adelantada y de manera sistemática el ariete Asier Goiría caía de manera constante en fuera de juego. El Cartagena se mantenía consistente, sólido en defensa y con un centro del campo en el que Iñaki Muñoz se mantuvo en buena línea con un Mariano por delante de la defensa pero sin olvidar la apertura del juego con lanzamientos a las alas. José Carlos aportaba gotas de calidad y Toni Moral estaba omnipresente con un derroche de lucha y verticalidad en su juego, presionando siempre.
El esfuerzo de Víctor, lo mismo para un roto que un descosido, se mantuvo hasta que le llegó el relevo en el minuto 83 pero en la primera fase las acometidas no fueron insistentes de cara a inquietar la meta de Mariño. El Villarreal B intentaba trenzar el juego con la calidad, atacaba pero siempre halló oposición en la concentración y anticipación.
En un partido con muchas alternativas, en las que el visitante no dejó de amenazar con el empate (ya en el primer tiempo hubo una jugada conflictiva con reclamación de penalti en el área de Casilla) al final el Cartagena se llevó el gato al agua porque fue más eficaz, se sacrificó más y aprovechó sus ocasiones. Cuando fue preciso cambió su estrategia para aguantar con el fin de sorprender al contragolpe. Fue cuando Clavero, como en la tarde del Huesca, salió para ser defensa zurdo y permitir al genial Botelho acercarse al área amarilla como carrilero adelantado, sin necesidad de recorrer tantos metros. Y llegó el espectáculo con el añadido del debut de Riga, que incordió y estuvo cerca de lograr un gol. Para el nuevo fichaje hubo 25 minutos de participación, con lo que José Carlos se marchó a la caseta.
AL CONTRATAQUE COMO ESTA MANDADO
El Cartagena supo al final defender su viña y salir rápido con la pelota. La réplica del Villarreal no cesió y su entrenador metió en la pelea a Wakaso, pero no dio resultado y todas las posibilidades de los castellonenses se condensaron en lanzamientos de golpes francos cerca del área albinegra como en ningún partido anterior ha sucedido. Por fortuna, los cartageneristas resolvieron todas esas acciones al 50 % con los especialistas amarillos en la ejecución de los castigos. Un tiro al pñalo de la meta de Casilla y la intervención de
Cygan bajo palos sacando un balón abortaron el gol forastero cuando se mantenía el 1-0. Ya con el 2-0, regalo de Pablo Ruiz, la inquietud se fue diluyendo y el público terminó disfrutando.
Con este marcador el Cartagena equilibra el número de goles a favor y en contra: 39 en casa casillero. Y sus actuales 48 puntos avalan una buena campaña, lejos los episodios donde la falta de concentración le hacía recibir demasiados goles. Por ahí está comenzando a gestarse el éxito. La defensa ya no regala y Casilla se mantiene en gran línea.
RESULTADO
FC Cartagena 2-0 Villarreal B
ALINEACIONES
FC Cartagena: Casilla (2); Txiki (2), Pablo Ruiz (2), Cygan (2), Botelho (3); Mariano (2), Iñaki Muñoz (2); Toni Moral (3), Víctor (2), José Carlos (2); Goiría (0). También jugaron Riga (1), Clavero (1) y Julien (-).
Villarreal B: Mariño (2); Olivas (1), Falqué (2), Gullón (2), Insa (1), Gerard Bordas (2), Mano (1), Airam (1), Marquitos (1), Costa (1), Dervite (1). También jugaron Castellani (1), Wakaso (1)
GOLES
1-0. Min. 27. Botelho de jugada personal por la izquierda.
2-0. Min. 78. Pablo Ruiz de cabeza.
ÁRBITRO
Prieto Iglesias, del colegio navarro. Tarjetas para los cartageneristas Mariano (68) y Txiki (89) y para los villarrealenses Airan Cabrera (13), Gullón (39), Bordás (51), Jaume (74), Nacho Insa(83) y Wakaso (71)
INCIDENCIAS
31ª jornada de la liga Adelante. Estadio Cartagonova.
9.833 espectadores en las gradas según datos del club.
La CRÓNICA
Por GUILLERMO JIMÉNEZ
Muy buen sabor dejó el Cartagena en su pelea con los villarrealenses. Sus jugadores se han vaciado y sacado a relucir lo mejor de que disponen, sus virtudes y han tapado sus defectos con casta para imponerse a un técnico Villarreal B con dos goles, uno en cada tiempo, dos goles de perfecta ejecución, el primero de Botelho, sensacional, y el segundo, de categoría, de un Pablo Ruiz incorporado al remate de una falta botada por Iñaki Muñoz. La permanencia casi está en el bote y se abre un abanico de posibilidades para pensar como mínimo en la fase de ascenso a Primera, la novedad de esta campaña.
El cuarto gol que marca Pedro Botelho en la Liga para el Cartagena, el de esta tarde ante el Villarreal B, que colocó el 1-0 en el marcador, levantó a los aficionados de los asientos en una tarde que comenzó por ser emotiva con dos actos previos: el homenaje póstumo a Txutxi Aranguren, con la exhibición de un pancarta portada por antiguos jugadores solos, y el homenaje por la estadística brillante de Víctor en el fútbol, con el testimonio de la entrega de una metopa por el presidente de la entidad, Paco Gómez.
El extraordinario gol de Botelho, conseguido a los 27 minutos, al realizar una galopada sensacional por su banda y acabar la jugada con un chutazo que batió a Mariño porque el brasileño optó por la individualidad ante la ausencia de compañeros en posición de hacer gol.
Diez minutos después el propio Botelho se sacó de la manga otra arrancada por el mismo carril, con su velocidad habitual, y buscó repetir la suerte del gol pero su tiro dio en el lateral de la red.
Hasta la llegada de ese tanto que rompía el 0-0 el partido transcurría por los caminos de una igualdad, un toma y daca con escasas llegadas de los albinegros al área amarilla. El Villarreal B organizó una defensa adelantada y de manera sistemática el ariete Asier Goiría caía de manera constante en fuera de juego. El Cartagena se mantenía consistente, sólido en defensa y con un centro del campo en el que Iñaki Muñoz se mantuvo en buena línea con un Mariano por delante de la defensa pero sin olvidar la apertura del juego con lanzamientos a las alas. José Carlos aportaba gotas de calidad y Toni Moral estaba omnipresente con un derroche de lucha y verticalidad en su juego, presionando siempre.
El esfuerzo de Víctor, lo mismo para un roto que un descosido, se mantuvo hasta que le llegó el relevo en el minuto 83 pero en la primera fase las acometidas no fueron insistentes de cara a inquietar la meta de Mariño. El Villarreal B intentaba trenzar el juego con la calidad, atacaba pero siempre halló oposición en la concentración y anticipación.
En un partido con muchas alternativas, en las que el visitante no dejó de amenazar con el empate (ya en el primer tiempo hubo una jugada conflictiva con reclamación de penalti en el área de Casilla) al final el Cartagena se llevó el gato al agua porque fue más eficaz, se sacrificó más y aprovechó sus ocasiones. Cuando fue preciso cambió su estrategia para aguantar con el fin de sorprender al contragolpe. Fue cuando Clavero, como en la tarde del Huesca, salió para ser defensa zurdo y permitir al genial Botelho acercarse al área amarilla como carrilero adelantado, sin necesidad de recorrer tantos metros. Y llegó el espectáculo con el añadido del debut de Riga, que incordió y estuvo cerca de lograr un gol. Para el nuevo fichaje hubo 25 minutos de participación, con lo que José Carlos se marchó a la caseta.
AL CONTRATAQUE COMO ESTA MANDADO
El Cartagena supo al final defender su viña y salir rápido con la pelota. La réplica del Villarreal no cesió y su entrenador metió en la pelea a Wakaso, pero no dio resultado y todas las posibilidades de los castellonenses se condensaron en lanzamientos de golpes francos cerca del área albinegra como en ningún partido anterior ha sucedido. Por fortuna, los cartageneristas resolvieron todas esas acciones al 50 % con los especialistas amarillos en la ejecución de los castigos. Un tiro al pñalo de la meta de Casilla y la intervención de
Cygan bajo palos sacando un balón abortaron el gol forastero cuando se mantenía el 1-0. Ya con el 2-0, regalo de Pablo Ruiz, la inquietud se fue diluyendo y el público terminó disfrutando.
Con este marcador el Cartagena equilibra el número de goles a favor y en contra: 39 en casa casillero. Y sus actuales 48 puntos avalan una buena campaña, lejos los episodios donde la falta de concentración le hacía recibir demasiados goles. Por ahí está comenzando a gestarse el éxito. La defensa ya no regala y Casilla se mantiene en gran línea.
