19 de mayo de 2013, 23:35
Machuca fue su primer entrenador pero dimitió varios meses después; a Pichi Lucas y Carlos Ríos dejó que acabasen sus contratos, igual que con Juan Francisco Alcoy quien llegó a entrenar al equipo hasta en tres ocasiones pero nunca llegó a cuajar en el banquillo. Apenas le dio tiempo.
Juan Ignacio fue siempre su entrenador ideal. Sabían tratarse. Se tenían cogido el paso. El uno y el otro hasta que Paco Gómez se cansó y decidió no renovar al de Rabasa. Pero tiene el inmenso mérito de haber sido el único que le ha soportado durante tres largas y fructiferas temporadas.
Pero si hubo alguien que Gómez no olvida es al tinerfeño David Amaral, el único que ha sido capaz de dejarle plantado. Fue en una comida en Murcia donde Amaral le dijo al de Jacarilla que lo dejaba porque no veía la más mínima infraestructura en el club. Y en eso este Cartagena sigue igual sino peor, apenas se ha avanzado.
