domingo. 19.05.2024
Aunque se temía pero no se sabía cuándo. Pero lo cierto es que Paco Gómez ha dicho de coger las riendas y tomar decisiones para salvar al equipo del serio peligro de amenaza para bajar de categoría. Lo ha hecho este martes en su despacho profesional en la última planta del edificio Godoy. Allí, el empresario de Jacarilla, ha venido a decir a Javi López y Pedro Reverte cuáles son sus intenciones prioritarias.

De momento, si fuera por Paco Gómez abriría las puertas del vestuario y empezaría a echar con una escoba a la gente que él cree que no le vale. Sería una medida de lo más arriesgada y así se lo han hecho ver algunos de sus colaboradores más cercanos, pero la realidad es que el presidente está muy desengañado de esta plantilla que se reunió para luchar por el ascenso y que va derechita a la Segunda B si nadie lo remedia antes.

Tiempo hay. De sobra. Bastaría con ganar en Jerez y hacer lo propio con los siguientes rivales, que son de los llamados ‘directos’ como el Huesca y el Huelva –en casa- y el Villarreal B a domicilio. Sumando esos 12 puntos cambiarían por completo las tornas. Con 25 puntos al término de la primera vuelta el Cartagena tendría muchas posibilidades de permanencia.

Pero Paco Gómez no es tonto como tampoco lo son Reverte o Javi López. Hacer ahora de una tacada lo que han sido capaces en todo este tiempo atrás no deja de ser una quimera. Por eso tiene previsto otro plan, éste mucho más drástico: echar a gente a la calle incluyendo al entrenador Javi López, amparado en que no ha sido capaz de sacar al equipo ni una sola vez de la zona de descenso en tres meses que lleva en el equipo.

Como buen empresario Paco Gómez dice las cosas sin decirlas. Es decir pone buena cara al entrenador albinegro pero, bajo manga, se escuchan nombres como el de David Vidal que llega promovido desde diversos medios que lanzan la piedra pero esconden la mano. El gallego lleva años sonando para entrenador cartagenerista pero es una opción que nunca acaba de cuajar.

Curiosamente, el nombre de Vidal también lo hemos podido leer entre la prensa jerezana como candidato al banquillo del Xerez. Pero allí están como aquí. Que no saben lo que hacer.
Si por Paco Gómez fuese se desquitaría de varios, de bastantes futbolistas del Cartagena pero todos le conocemos y sabemos de su capacidad para dar varios golpes de timón en poco tiempo, capaces de desconcertar al más pintado.

Pero sus colaboradores más cercanos, especialmente Manolo Grau que siempre destaca por su prudencia, le recomiendan alguna dosis de tranquilidad, de no tirar el carro por el pedregal aunque Paco Gómez puede temer por el tiempo que corre en contra.

Lo que sí ha dejado claro el ‘jefe’ del Cartagena es que en Xapín hay que ganar sí ó sí. No valen excusas. Hay que ganar. Y ahí sí queda un puñetazo encima de la mesa que puede sonar a ultimátum. No sería la primera vez que el de Orihuela ha fichado a tres y hasta cuatro entrenadores, como aquel año que Pedro Arango tuvo que ejercer de entrenador en el banquillo de Ceuta y en Badajoz (Cerro Reyes) mientras se le buscaba sustituto a David Amaral que, cansado de las excentricidades del presidente, le dejó con todos los trastos de matar siendo el primero y el único capaz de hacerle tal desplante.

Su idea es la de ir fichando a jugadores y despidiendo a la vez. Cree que los que vengan estarán ‘frescos’ para jugar aunque ya le han explicado que no tiene nada de fácil ahormar un equipo de la noche a la mañana. Pero él dice, y no le falta razón, que muchos de los que hay le han fallado y que es cuestión de dar un puñetazo encima de la mesa.

El presidente albinegro tendrá muchas cosas pero tonto no es. Sabe que esta empresa se le hunde y que tiene que poner soluciones por la vía rápida.

Paco Gómez se pone serio
El usuario es responsable de sus comentarios. Se compromete a que no difamen, insulten, contengan información falsa, abusiva, pornográfica, amenazadora, que dañe la imagen de terceras personas o que infrinja alguna ley.
Sportcartagena se reserva el derecho de eliminar los comentarios que considere inadecuados.
Comentarios