31 de agosto de 2014, 12:45
Los chicos rojiblancos que componen el equipo filial son una selección de futbolistas llegados a la vega de Granada dispuestos a hacerse con un puesto a corto o medio plazo en Primera. Tienen hambre se balón. Los hay de bastantes nacionalidades y al jugar sin presión logran hacerlo bien.
El Cartagena, así las cosas, bastante hizo con aprovechar el sábado una coyuntura por parte de Migue García para conseguir el gol del empate y sumar dos puntos en el resumen de las dos primeras jornadas. Poca ganancia pero suficiente para dar gracias a que la falta de acoplamiento no haya causado destrozos superiores.
El miércoles toca la Copa del Rey y el domingo, ante el mismo rival UCAM Murcia, la Liga en el mismo escenario del Cartagonova en tanto el club albinegro debe cerrar el capítulo de fichajes con Sebastián Ribas y un portero sub 23, todo esto a quemarropa porque el plazo se agota. Ahora sí.
