6 de septiembre de 2014, 20:07
LA SITUACIÓN
No es muy halagüeño el panorama del actual Cartagena. Con un equipo cerrado hace escasos días, con jugadores incorporados en el último minuto, y sin todavía dar sensación de equipo hecho, formado, serio. El pasado día 3 las cosas se torcieron un poco más y llegó una de las pitadas más tempraneras que se recuerdan. Con apenas tres partidos oficiales la grada ya mostró su desencanto con una planificación que parece un tanto improvisada, y con unas piezas clave que de momento no están para jugar. El único asidero real son las jugadas a balón parado, de donde han venido los hasta ahora dos únicos goles.
Lo complicado a partir de ahora será intentar revertir la tendencia peligrosa en la que anda metido el equipo. Adquirir una dinámica ganadora, con confianza, será clave para dejar de perder puntos por el camino. La pregunta es, ¿desde donde vendrá el cambio? ¿Será la entrada de algún nuevo futbolista a un once que parece fijo? ¿Será un cambio de sistema de juego? Lo que parece meridianamente claro es que algo, lo que sea, debe cambiar.
CÓMO LLEGA EL CARTAGENA
Los albinegros (14º con 2 puntos) no tienen lesionados ni sancionados, por lo que Julio Ribas podrá convocar a todos los jugadores disponibles. Solo hay un descarte, y que se promulgó por él mismo y de manera espontánea: Robusté afirmó en su presentación que no está para jugar, que no lleva pretemporada en las piernas y que tiene que seguir trabajando para ponerse a tono. Teniendo en cuenta que ni Diego Ruiz ni Manzanares deben ser los que cojan la responsabilidad de llevar al equipo hacia arriba, nos topamos con los mismos que han jugado hasta ahora más una posible aparición: Sebastián Ribas.
El delantero uruguayo, ex del Génova, podría convertirse en la primera aparición de los últimos fichajes. Ya el pasado jueves completó un partidillo de entrenamiento a buen ritmo demostrando que llega en condiciones para competir desde ya. Si lo hiciera, la mayoría de las miradas se posarían sobre él, ya que llega con un cartel de goleador contrastado en ligas de mayor nivel. Con la posibilidad de su entrada, y nada más, el equipo que veamos este domingo en el terreno de juego será muy parecido al del pasado miércoles, salvo revolución.
EL RIVAL
El UCAM Murcia (4º con 4 puntos) ya demostró en el partido copero que aprendió bien la lección en su anterior paso por 2ªB y han confeccionado un equipo como para no pasar apuros en conseguir la permanencia. Un conjunto con una circulación aseada de balón y atrevimiento en los metros finales. Seguramente este domingo veamos una versión similar, pero con varios cambios en el once de la Copa. Quien no podrá estar será el centrocampista Chavero, sancionado tras el partido de la pasada jornada en la que vencieron al Lucena (2-1).
