25 de mayo de 2010, 2:00
Los infantiles del filial del Cartagena ponían el broche de oro a la sensacional temporada que han protagonizado con una nueva y contundente victoria, en esta ocasión frente al Muleño (0-8). El encuentro se disputó en las modernas instalaciones del Complejo Deportivo José Soriano Espinosa “Chacón”, una de las mejores de cuantas se han visto esta temporada en la liga autonómica infantil.
Los cartageneros dominaron el encuentro de principio a fin, aunque les costó bastante encontrar el camino del gol. El muleño, capitaneado por un soberbio Pablo Parraga, se defendió con uñas y dientes durante la primera mitad, pero acabó sucumbiendo ante la exquisitez de juego que exhibieron los cartageneros en el segundo tiempo.
Los de Paco Pedreño dieron su primer aviso en el minuto quince de la primera parte con un gol de Mario Solano que fue dudosamente anulado por el colegiado por considerar que el delantero cartagenero se encontraba en posición de fuera de juego. Hubo que esperar diez minutos más para que Placido Lizancos pusiera el 1-0 en el marcador, tras rematar a la red un balón que le regaló Solano desde la banda.
El segundo llegaba en el minuto treinta y fue obra del capitán Jose Luis Martínez. El de Santa Ana le ganaba la posición por alto a toda la defensa local y remataba al fondo de las mallas un balón cazado tras el saque de una falta desde la banda. Y tan solo tres minutos después, Jose Isidoro Velasco recogía un balón rechazado por el larguero y empalmaba un potentísimo disparo que supuso el 0-3.
Ya en la segunda parte, Jose Luis Martínez le ponía un balón largo a Felipe Ortiz y éste conseguía plantarse con una veloz carrera frente al portero local para superarlo por cuarta vez.
El quinto tanto lo anotaba Jose Luis Gómez, tras convertir un penalti cometido sobre Jaime López y acertar en los dos lanzamientos que se vio obligado a realizar. Este tanto tuvo una significación muy especial para el bravo lateral cartagenero, ya que le permitió sacarse la espina que tenía clavada desde la pasada semana santa tras haber fallado el lanzamiento de una pena máxima.
Mario Solano también vio recompensada la sensacional actuación que tuvo en este encuentro con un bonito gol que conseguía a pase de Jose Luis Martínez y que suponía el 0-6.
Los dos últimos tantos del encuentro fueron obra de Jaime López y tuvieron una factura muy similar. En el primero de ellos, Salva Martín realizaba una sensacional jugada personal por la banda y le regalaba un balón a López para que lo rematara a placer al fondo de las mallas. Y tan solo un par de minutos después, Jose Luis Martínez conseguía volver a plantarse dentro del área, dejando por el camino a cuantos defensas se fue encontrando, y centraba un balón al segundo palo que el de La Manga volvió a colocar dentro de la portería para hacer el octavo y definitivo tanto.
De esta manera tan brillante, el Cartagena-La Unión despedía una temporada de ensueño en la que han conseguido meterse por meritos propios en la historia del futbol cartagenero, tras proclamarse campeones de liga, vencer en los veintiséis partidos disputados, superar por dos veces al todopoderoso Real Murcia y convertirse en un auténtico referente del futbol base regional.
Los cartageneros dominaron el encuentro de principio a fin, aunque les costó bastante encontrar el camino del gol. El muleño, capitaneado por un soberbio Pablo Parraga, se defendió con uñas y dientes durante la primera mitad, pero acabó sucumbiendo ante la exquisitez de juego que exhibieron los cartageneros en el segundo tiempo.
Los de Paco Pedreño dieron su primer aviso en el minuto quince de la primera parte con un gol de Mario Solano que fue dudosamente anulado por el colegiado por considerar que el delantero cartagenero se encontraba en posición de fuera de juego. Hubo que esperar diez minutos más para que Placido Lizancos pusiera el 1-0 en el marcador, tras rematar a la red un balón que le regaló Solano desde la banda.
El segundo llegaba en el minuto treinta y fue obra del capitán Jose Luis Martínez. El de Santa Ana le ganaba la posición por alto a toda la defensa local y remataba al fondo de las mallas un balón cazado tras el saque de una falta desde la banda. Y tan solo tres minutos después, Jose Isidoro Velasco recogía un balón rechazado por el larguero y empalmaba un potentísimo disparo que supuso el 0-3.
Ya en la segunda parte, Jose Luis Martínez le ponía un balón largo a Felipe Ortiz y éste conseguía plantarse con una veloz carrera frente al portero local para superarlo por cuarta vez.
El quinto tanto lo anotaba Jose Luis Gómez, tras convertir un penalti cometido sobre Jaime López y acertar en los dos lanzamientos que se vio obligado a realizar. Este tanto tuvo una significación muy especial para el bravo lateral cartagenero, ya que le permitió sacarse la espina que tenía clavada desde la pasada semana santa tras haber fallado el lanzamiento de una pena máxima.
Mario Solano también vio recompensada la sensacional actuación que tuvo en este encuentro con un bonito gol que conseguía a pase de Jose Luis Martínez y que suponía el 0-6.
Los dos últimos tantos del encuentro fueron obra de Jaime López y tuvieron una factura muy similar. En el primero de ellos, Salva Martín realizaba una sensacional jugada personal por la banda y le regalaba un balón a López para que lo rematara a placer al fondo de las mallas. Y tan solo un par de minutos después, Jose Luis Martínez conseguía volver a plantarse dentro del área, dejando por el camino a cuantos defensas se fue encontrando, y centraba un balón al segundo palo que el de La Manga volvió a colocar dentro de la portería para hacer el octavo y definitivo tanto.
De esta manera tan brillante, el Cartagena-La Unión despedía una temporada de ensueño en la que han conseguido meterse por meritos propios en la historia del futbol cartagenero, tras proclamarse campeones de liga, vencer en los veintiséis partidos disputados, superar por dos veces al todopoderoso Real Murcia y convertirse en un auténtico referente del futbol base regional.
