26 de abril de 2013, 23:12
Mucho ambiente, como el de las grandes ocasiones, en las gradas del pabellón del colegio Franciscanos para presenciar este pulso con el colegio Maristas, que cada curso se celebra por estas fechas.
Esta vez el resultado no dejó lugar para la duda. El 4-9 final refleja lo que ocurrió. Superioridad casi desde el principio del equipo visitante, mucho más certeros y más metidos en el partido que los locales.
Hasta el 2-2 hubo cierta igualdad sobre la cancha, pero fue a partir de ahí cuando los de Maristas empezaron a distanciarse. Al descanso se llegó con un 2-4 premonitorio.
En la reanudación fue todo coser y cantar para Maristas, que llegó a tener un parcial de 2-8 pero dos goles postreros de Franciscanos maquillaron en parte un marcador que dejó claro quien ha sido superior este año.
Lo mejor estuvo en la grada, completamente llenas con alumnos de uno y otro colegio que animaron si cesar a sus equipos.
Al final fue una tarde entretenida que acabó de forma noble y deportiva, que era de lo que se trataba.