El máximo responsable del Reale Cartagena, de fútbol sala, está a punto de ‘coger un camino’. Él mismo lo dice. “Estoy desmoralizado por completo, ni paga el Ayuntamiento ni paga la Comunidad y esto ya ha llegado a un punto de que es inaguantable”.
“Veremos a ver si aguantamos hasta diciembre” avisa. “Y si llegamos igual le doy la carta de la libertad a todos los jugadores y que ellos hagan lo que quiera. Lo que yo no voy a hacer es arruinar mi empresa porque ni la Comunidad ni el ayuntamiento nos pagan todo lo que nos deben. Eso sí, a la hora de inscribir al equipo bien que me dijeron “inscríbe al equipo” para que después nos hagan esto. Si lo llego a saber…”
Mínguez añade que “ya veremos si en diciembre somos otro equipo o no. Lo que no podemos es seguir así. Es verdad que nadie me obligó en su momento a estar aquí pero, por eso mismo, nadie puede obligarme a que me quede. Y cuando me vaya espero que aparezca algún empresario cartagenero que, por lo menos, tenga los mismos cojones que yo”.
