Las incógnitas pueden ser despejadas para que los aficionados sepan a lo que atenerse.
La evidencia indica que Antonio Mínguez se encuentra en una fase de depresión deportiva, muy cansado por tantas decepciones y por un trabajo ímprobo. Las ayudas económicas no llegan como exige el normal desenvolvimiento de un club y la caída en Segunda ha sido un mazazo para todos.
Es posible que Antonio Mínguez ponga algunas condiciones para continuar pero su cansancio puede conducirle a que, aun queriendo colaborar porque su amor al club es enorme, llegue a delegar en otra pieza importante del club, el director gerente Roberto Sánchez, experto y conocedor de todos los entresijos y muy relacionado con la LNFS.
Es una posibilidad que no ha sido confirmada ni desmentida pero acerca de la cual sabremos algo este viernes. El futuro del Futsal Cartagena está en el aire y la afición tiene que involucrarse en este estado de cosas para que no se vaya al traste. Una muy buena campaña de socios ayudaría a la consecución de los objetivos.
Hay ideas en marcha para mejorar la situación y mucho trabajo por delante.
