El maestro Kang , de 66 años, ha pasado casi media vida en España. Tres años en Pamplona y treinta y seis en Cartagena. Su primera alumna fue Carmen Navarro, cartagenera, que ha llegado a árbitro internacional y en cuestión de días tiene compromisos en México y en Londres. Carmen está en posesión de tres medallas de oro.
En el gimnasio, en calle Pintor Balaca, 31, repleto de trofeos y medallas que cubren toda la superficie de varias vitrinas,
le ayuda su hijo Seong Dong Kang Lee, también maestro internacional. En otro apartado, en un anexo ejerce la acupuntura.
¿Cuántos trofeos exhibe el maestro Kang?
“No los he llegado a contar. Los ha contado uno de los alumnos y me ha dicho que hay unos trescientos”.
El mejor de los trofeos es la serie de lazos de amistad con sus alumnos y antiguos alumnos que aprendieron esta arte marcial y que no dejarán de acudir a la cita del homenaje al maestro, un personaje popular y muy querido. El número de inscritos a la cena no descenderá del centenar. Alguno de ellos ha llegado alto en el taekwondo.
Chun Kil Kang empezó en el taekwondo cuando tenía 13 años de edad, y su hijo al cumplir 6 años. Está orgulloso de que este arte marcial cuente en España con más licencias que el fútbol. En la Región de Murcia hay unas 1.500 en la federación que preside José Antonio Solano y Cartagena es plaza fuerte como lo es Murcia o Totana.
Solo falta entrar en las Olimpíadas y piensa que todo se andará. Hay campeonatos del Mundo y de Europa de muy alto nivel.
JÓVENES QUE DESPUNTAN
En Cartagena hay practicantes del taekwondo muy jóvenes que ya apuntan alto como Arturo, de 15 años, el que más destaca, que ya ha acudido al campeonato de Europa. Y en féminas sobresale la también cartagenera Paula Vergara Tomás, campeona de España a sus 9 años de edad.
El sábado 26 de noviembre, el maestro Kang hará tal vez más reverencias que nunca, fiel a la costumbre coreana, cuando le ofrezcan un homenaje que se ha ganado a pulso por su trabajo con el kimono puesto, enseñando todas las técnicas del taekwondo.
