28 de octubre de 2009, 1:00
Así, un nuevo jugador del filial sube hasta el primer equipo para poder tener la oportunidad de jugar con un equipo de Primera División. Con esta incorporación, el Real Murcia ratifica su apuesta por jugadores del filial en las que ya han demostrado su buen juego, Kike, Mario Marín y Sergio.
El choque de mañana supone para Campos una nueva prueba de fuego, pues el partido frente al Albacete podría ser su última oportunidad para demostrar su capacidad de entrenar a un equipo de Segunda División. El ambiente está caldeado y por el momento sólo cabe esperar.
El choque de mañana supone para Campos una nueva prueba de fuego, pues el partido frente al Albacete podría ser su última oportunidad para demostrar su capacidad de entrenar a un equipo de Segunda División. El ambiente está caldeado y por el momento sólo cabe esperar.
