Muy mala situación es la del CD Castellón, sumido en una importante crisis económica que le puede conducir a su desaparición.
El pasado viernes 24m más de 1.200 personas se congregaron en una manifestación pacífica en la que se le exigía a los propietarios del club su salida inmediata. Ese mismo día, en jornada matinal, el alcalde de Castellón, Alberto Fabra, y la concejala de Deportes, Begoña Carrasco, mantuviron una cumbre con las cabezas visibles de los dos grupos más representativos de la afición orellut: la Federación de Peñas y Sentimiento Albinegro.
En la ciudad de la Plana se teme tanto por el descenso e incluso por la desaparición. Así de tajante fue Pilar Moliner, presidenta de la Fedpecas, que confesó que “la gente teme lo peor”. “Si Castellnou no abona 550.000 euros antes del 30 de junio, el descenso será una realidad. Y debo confesar que los aficionados están preocupados porque si se baja a 3ª habrá que estar dos años obligadamente. Incluso muchos son pesimistas y hablan de desaparición”, remarcó.
