. Ramón Fuentes, de Telecinco y Marca, ha informado que la Liga de Fútbol Profesional le ha dado una vuelta más a la tuerca en su conflicto con las emisoras de radio, pues se quiere esta vez implicar a los operadores de televisión, a quienes han pedido que corten la señal que ofrecen a las emisoras de radio.
Lo cierto es que la LFP ha podido cerciorarse de que las cadenas radiofónicas continúan transmitiendo los partidos, a pesar de que se les prohibe acudir a las cabinas de los estadios. Lo hacen con los diferentes narradores llevando a los oyentes las imágenes que ven en un receptor de televisión.
Así que han pedido oficialmente a los operadores, en un escrito oficial, que "controlen o impidan" que las emisoras de radio hagan uso de la señal de sus partidos para la retransmisión de los encuentros de la Liga y la Copa del Rey. E, incluso, hacen llegar a los operadores una lista de domicilios desde los que suponen que se están transmitiendo los partidos, presumiblemente las direcciones de los estudios de las radios. En el escrito la Liga argumenta que la transmisión de los partidos por radio a través de la televisión "no puede hallar amparo en el ejercicio del derecho a la información", y subraya que se trata de una "violación de los derechos radiofónicos" para los partidos de Liga y Copa.
Además, "se lleva a cabo infringiendo las condiciones contractuales" por las que las televisiones ofrecen las imágenes a sus clientes, puesto que entienden que los abonados a esos servicios reciben la señal "en calidad de usuarios finales" y que no están autorizados para comercializarla mediante cualquier acto de comunicación o difusión pública.
Basándose en todo esto, instan a los operadores -se supone que quienes tienen la señal codificada- a que pidan "de forma inmediata a las radios que cesen la retransmisión de los partidos", tanto de Liga como de Copa. La comunicación, que tiene fecha del pasado miércoles día 5, es perentoria y concede un plazo de 48 horas a los operadores para que no solamente corten la señal a las emisoras, sino que también les retiren los codificadores, antenas o tarjetas que permiten la correcta visión de los partidos de fútbol.
La situación está así.
