13 de julio de 2009, 2:00
El Lorca busca ingresos atípicos para salvar su situación y confía que en septiembre se hayan realizado unas obras en la zona del Artés Carrasco para que funcionen una tienda deportiva, un restaurante y una cafetería.
Al mismo tiempo esperan negociar pronto con los jugadores en relación con el finiquito de todos ellos, a la baja en busca de un sustancial ahorro de dinero para el club.
Manuel Muñoz Carrillo, presidente del Lorca, considera que “los problemas económicos están en todas partes y el fútbol y el Lorca no son excepción. Se ha vivido de la burbuja del ladrillo y hay que adaptarse a otras salidas”.
“Estamos pendientes de un proyecto que tiene las bendiciones de los grupos políticos municipales”, añadió Muñoz Carrillo.
Al mismo tiempo esperan negociar pronto con los jugadores en relación con el finiquito de todos ellos, a la baja en busca de un sustancial ahorro de dinero para el club.
Manuel Muñoz Carrillo, presidente del Lorca, considera que “los problemas económicos están en todas partes y el fútbol y el Lorca no son excepción. Se ha vivido de la burbuja del ladrillo y hay que adaptarse a otras salidas”.
“Estamos pendientes de un proyecto que tiene las bendiciones de los grupos políticos municipales”, añadió Muñoz Carrillo.