El Murcia consuma su descenso y acompañará al Cartagena en la Segunda B

 Hércules: Falcón, Cortés, Pamarot, Mora, Peña, Paglialunga, Mario Rosas (Braulio, m.46), Edu Bedia (Toti, m.55), Javito (Borja, m.55), Nacho González y Portillo.
Real Murcia: Javi Jiménez, Molinero, Tagliafico, Jorge, Dos Santos, Nafti, Acciari (Toribio, m.60), Albiol (Pifarre, m.84), Matilla, Saúl (Sutil, m.77) y Kike García.
Goles: 0-1, m.21: Saúl. 0-2, m.58: Matilla.
Árbitro: López Acera (Colegio Extremeño). Amonestó a David Cortés y Braulio, del Hércules, y a Jorge, Molinero y Acciari, del Murcia.
Incidencias: Partido correspondiente a la jornada 41 de Liga en Segunda División, disputado en el estadio Rico Pérez de Alicante ante unos 9.000 espectadores.

 

LA CRÓNICA

El conjunto murciano estaba obligado a ganar en Alicante para mantener esperanzas de permanecer en Segunda División, pero dependía también de que el Mirandés no ganara su partido, hecho que no ha sucedido.

Desde los compases iniciales del choque quedó patente que el Murcia era el único equipo que verdaderamente se jugaba algo en el envite, pese a que Quique Hernández, técnico del Hércules, alineó un equipo plagado de titulares habituales, después de que se hubiera especulado con que pudiera dar minutos a futbolistas con menos oportunidades durante la Liga.

Sin ejercer un dominio abrumador, el Murcia sí que se acercó al área alicantina desde los primeros minutos con disparos lejanos que no pusieron en excesivos aprietos al meta Falcón.
La primera gran ocasión de los visitantes fue a los dieciséis minutos, en un mano a mano ante Falcón que desperdició Kike García al disparar fuera. Fue el preludio del cero a uno, obra de Saúl tras batir por bajo al portero alicantino tras marcharse por velocidad de Cortés.

En la primera mitad, el único disparo del Hércules con cierto peligro fue de Javito en los compases iniciales y los de Quique Hernández se marcharon al vestuario en el descanso entre algunos pitos de sus aficionados.

Los alicantinos regresaron al terreno de juego con algo más de intensidad, gracias, en parte, a la inclusión de Braulio en el ataque en detrimento de un centrocampista, en este caso Mario Rosas.

Sin embargo, el Murcia fue el que volvió a ver puerta a los 58 minutos, tras culminar Matilla un contragolpe bien llevado por Kike García. El cero a dos era prácticamente la sentencia puesto que no daba la sensación de que el Hércules pudiera remontar el choque.

Las incursiones por banda del canterano Borja y un disparo de Mora tras un fallo del portero Javi Jiménez fueron las únicas acciones que levantaron cierta expectación entre los aficionados herculanos, que en algunos casos se marcharon enfadados con el partido de su equipo.