GUILLERMO JIMÉNEZ
Se jugaba el pasado domingo el At. Pulpileño-Mar Menor de Tercera División en el campo de San Miguel de la localidad almeriense, partido que ganó el equipo visitante por 0-1, y dos futbolistas del equipo azul -Pichi y José Isidoro- sufrieron supuestos mordiscos en pecho y hombro durante el primer tiempo del juego por parte de jugadores locales. Los dedos acusadores señalan a Perico y Kiko, dorsales 7 y 9
Pedro Sánchez Pérez, Perico', de 25 años, es un jugador canterano de Águilas con experiencia en Tercera. Jugó en La Unión.
Juan Francisco Haro Martínez 'Kiko', también delantero, lleva cuatro campañas en el At. Pulpìleño en Tercera.
De esas agresiones, grabadas en vídeo por el Mar Menor -que consigue documentos videográficos de todos sus encuentros- dieron cuenta pública personas del club visitante. Su entrenador Juan Lillo, colgó en facebook ese mismo día fotografías de las marcas dejadas por los mordiscos en los dos agredidos de su equipo. Lillo jamás vio algo parecido en su etapa de deportista.
Al menos uno de los futbolistas mordidos -José Isidoro, jugador cartagenero de 19 años- pasó por Urgencias de un Centro médico el mismo domingo y el facultativo certificó que el deportista sufría los efectos de "mordisco humano". Lo trataron con betadine y a casa.
El lorquino Pérez Jurado, árbitro del encuentro, que es un colegiado relativamente experto, no se enteró de los hechos acaecidos en el campo de juego porque al respecto nada consignó en el acta del partido de estos supuestos actos, aunque en el descanso del mismo responsables del Mar Menor CF le indicaron que había sacado una tarjeta amarilla a uno de los agredidos con el mordisco y a los agresores no les había sucedido nada.
A última hora de la noche del mismo domingo este medio digital informó a sus lectores hasta donde sabía de los hechos. A posteriori el Mar Menor CF hizo acopio de informes y documentos con destino a la Federación de Fútbol de la Región de Murcia para plantear denuncia. El Atlético Pulpileño reaccionó pronto con un comunicado en su cuenta de tuiter por el que lamentaba lo ocurrido, no aclaraba los hechos y al mismo tiempo atacaba a jugadores marmenorenses. A las pocas horas se lo pensaría mejor el club de Pulpí y retiraba de la circulación ese comunicado por el que evidentemente practicaba la vieja táctica de defender atacando.
Al día siguiente la entidad almeriense colgaba un nuevo comunicado, muy conciliador y en diferente tono al primero, pidiendo disculpas, anunciando que sus jugadores agresores serán castigados en el régimen interno del club y dando a entender que lo ocurrido se iba a solucionar amistosamente con una comida entre directivos del At. Pulpileño y del Mar Menor CF, "y aquí no ha pasado nada", decimos aquí de nuestra propia cosecha.
Que se sepa, en su remodelada página web la Federación Territorial no ha dado cuenta de acuerdo alguno sobre resoluciones por parte del Juez Único en la jornada del domingo en Tercera. Y es que la pelota del partido At.Pulpileño-Mar Menor ha pasado a Antiviolencia, según lo que se ha podido saber.
Si hay acuerdo tácito entre todas las partes es algo que se va a conocer a no tardar demasiado. ¿Podrían irse de rositas los jugadores 'vampìros'? Llegado un momento al Mar Menor parece se le indicó la conveniencia de no difundir las secuencias de los mordiscos que recogieron in situ las grabaciones del propio club.