- Los más de 500 kilómetros que separan Sevilla de Cartagena son el principal hándicap para que Puri Bordalás se convierta en una más de los casi 21.000 seguidores valencianistas con los que va a contar el conjunto ‘ché’ en la capital sevillana. “Para mí la distancia es mucha, está muy lejos. Prefiero verlo tranquila en casa” dice la hermana mayor de la familia Bordalás. “Éramos diez hermanos, pero el mayor falleció hace un par de años y ahora la mayor soy yo” nos cuenta resignada en el campo de fútbol de Ciudad Jardín, donde hemos quedado para llevar a cabo este reportaje.
Ahí, bajo una lluvia incipiente, nos cuenta los casi 50 años que lleva ejerciendo como cartagenera, sus tres hijos lo son y sus seis nietos también. Conoció a su marido, que ya no está entre nosotros desde hace veinte años, en el barrio alicantino de Rabasa y de allí a Cartagena para instalarse definitivamente porque su esposo era cartagenero y de los que ejercían además.
Alicantina de nacimiento en el barrio de Rabasa lleva casi medio siglo residiendo en Cartagena, donde tuvo sus tres hijos; es la hermana mayor de los nueve hermanos que son y una ferviente seguidora del técnico valencianista
Volvemos al tema de la final de la Copa del Rey mientras sigue el pequeño ceremonial fotográfico: “Pepe (Bordalás) lo está haciendo muy bien en el Valencia, se lo merece. Es un tío cojonudo, un buen hermano. Tenemos bastante contacto, seguramente menos del que nos gustaría pero el fútbol le quita mucho tiempo. De vez en cuando ya nos reunimos en la casa que se ha hecho en la playa de San Juan (Alicante) y allí lo pasamos muy bien. Pepe es un tío cercano aunque muchas veces parezca otra cosa desde el banquillo” (se ríe).
Puri también es familia cercana de otro ilustre técnico, Juan Ignacio Martínez Jiménez, actual entrenador del Real Zaragoza y uno de los técnicos más venerados (criticado por otros) del cartagenerismo y por si era poco, un yerno suyo dirige a uno de los equipos de base del Nueva Cartagena. “Por fútbol no va a faltar” dice sonriendo.
Los mil cien kilómetros que hay entre ida y vuelta Cartagena-Sevilla-Cartagena por carretera, principal hándicap para que Puri Bordalás esté junto a su familia este sábado en el Estadio Olímpico sevillano
No viajará a Sevilla porque supone un palizón de kilómetros “y ya no estoy para esos trotes” pero sí nos recuerda que en la visita que hizo el Valencia a Cartagena, precisamente eliminando a los blanquinegros de la competición (1-2) el pasado 5 de enero si acudió hasta el Cartagonova “para darle un beso porque lo quiero mucho” pero la final de la Copa del Rey prefiere verla tranquilamente en el salón de casa. “Para eso están los jóvenes, ellos sí que van a viajar para apoyarle”. Nos añade que van a llevar una buena pancarta con el nombre del preparador del VCF.
La hermana mayor de Pepe Bordalás siempre ha seguido su trayectoria muy de cerca. “Pepe siempre lo ha hecho bien en donde ha estado, especialmente en Getafe, donde hizo un gran trabajo y ahora yo creo que le estarán echando de menos. Pero donde peor se portaron con él fue en el Alavés porque después de ascenderlo a Primera lo pusieron en la calle. No se portaron bien”.
Su hermano viene por Cartagena de vez en cuando pero donde más coinciden es en Alicante. “Muchas veces también va Juan Ignacio, tú ya sabes que con mi primo Juan nos llevamos fenomenálmente bien, es un tío grande además de otro gran entrenador. Yo los quiero mucho a los dos”.
Aunque estuvo viendo en el Cartagonova el Efesé-Valencia y el 3-0 de los albinegros al Zaragoza de su primo JIM dice que cuando gana el Cartagena también se alegra mucho y que no le habría importado que lo hubiese hecho ante el equipo 'che'
Puri estuvo viendo el reciente Cartagena-Zaragoza (3-0) y reconoce que el equipo albinegro jugó mejor. Del copero Cartagena-Valencia se alegró de la victoria de su hermano “pero si hubiera ganado el Cartagena también me habría alegrado, que yo ya soy muy cartagenera ehhh” dice con una amplia sonrisa.
De lo que puede ocurrir este sábado en Sevilla no se atreve a pronosticar demasiado “pero va a ganar el Valencia, mi hermano se merece un triunfo así y a mí me hará muy feliz. Yo, desde luego, soy del equipo de mi hermano”.
Puri, que es agradable como ella sola, está acompañada de su hijo Federico, que guarda algún parecido con su tío Pepe Bordalás y con su primo Juan Ignacio “aunque es a mi padre a quien más le parezco” y nos recuerda una anécdota curiosa: “Por parte de la familia Jiménez resulta que unos escribimos el apellido con G como yo y otros con J. Una vez tuvimos que ir a una notaría en Alicante y el escribiente nos cambió el apellido y desde entonces estamos así. Por ejemplo, mi primo Juan Ignacio, como primo hermano que es, debería escribir el apellido igual y sin embargo él lo hace con J y nosotros con G, pero bueno, ya nos hemos acostumbrado” nos dice con buen humor antes de recogerse en casa. La lluvia aprieta y hay que cuidarse.
